Este verano nos vamos a cuidar muy bien (sin renunciar a nada…)

Inicio Beautylovers Este verano nos vamos a cuidar muy bien (sin renunciar a nada…)

Tanto si durante este invierno os habéis estado cuidado y no queréis perder la línea en un par de meses de verano, como si no llegáis con la mejor forma a lucir el bikini (y, por eso mismo, vuestra anatomía no está como para añadirle algún kilito extra), os damos unos sencillos trucos para disfrutar al máximo de una animada vida social sin perder las formas, ¡y con copas incluidas!

No es que os estemos diciendo que os entreguéis con frenesí a la vida loca, pero en verano hay que relajarse, saber disfrutar del tiempo de ocio, que inevitablemente ampliamos hasta altas horas de la noche (temperaturas tórridas obligan…). Con un poco de sentido común, podemos asistir a comidas de amigos o tomarnos el aperitivo en el chiringuito de la playa sin atragantarnos al mirarnos el ombligo. Tan solo hay que apostar por alimentos sanos y de temporada. Veréis qué fácil, #BeautyLovers.

Hora del aperitivo

A veces renunciamos al aperitivo porque siempre nos han dicho que el picoteo entre horas es lo que más engorda, pero bien entendido podemos incluirlo en nuestra dieta. Tan solo debemos inclinarnos por alimentos poco calóricos, como tomates cherry o tomates secos, crudités, pepinillos en vinagre… Realizar un picoteo entre el desayuno y la comida, hará que lleguemos menos hambrientas al almuerzo. Tampoco debemos huir siempre de los alimentos que contengan más calorías, como los frutos secos, simplemente hay que moderar su cantidad o comerlos cuando vayamos a realizar una actividad física más intensa (un día de piscina, un partido de tenis o un bailar hasta el amanecer…).

¿Qué comemos hoy?

No es necesario entrar en #modopánico cuando tengamos que asistir a una comida de amigos o si en vacaciones decidimos comer en el chiringuito de la playa. Sin embargo, sí hay que ser sensatas y no elegir lo más pantagruélico de la carta, sino optar por los alimentos menos procesados y más ligeros. Por ejemplo, mejor si evitamos las frituras de pescado y nos decantamos por pescados o carnes magras a la plancha acompañados de verduras. Vamos, que tendremos que renunciar al pescaíto frito, pero, en cambio, podemos pedir con traquilidad unas sardinas al espeto, que también son deliciosas.

Di siempre sí a un buen gazpacho casero como primer plato porque te saciará y calmará tu sed, además de que te beneficiarás de un cóctel de vitaminas y antioxidantes que contribuirá a potenciar tu bronceado y a que tu piel se vea más jugosa.

Ojo con las ensaladas, que son muy sanas pero también pueden ser muy calóricas, según el aliño o los complementos que se le añadan para hacerlas más sabrosas. Como norma, escoge las más sencillas.

¿Y las copas?

No os vamos a engañar, el alcohol engorda, así que con moderación. Pero si asistimos a una fiesta o a un encuentro de amigos, ¿cómo renunciar a tomar una cerveza o una copa? Pudiendo elegir, decántate por la clásica cerveza rubia, que por su alto contenido en potasio y bajo en sodio, es muy diurética, y por el vino blanco. Los cócteles son los que más calorías aportan, así que si podemos pedirle al barman que evite al azúcar y lo sustituya por algún edulcorante, mucho mejor. Otra opción para que el camarero no nos tome por una esnob, es pedir una copita de champagne, tan sofisticada y que solo tiene 84 calorías. Este será nuestro secreto, #BeautyLovers, shhhhhh…