Las clínicas de medicina estética se preparan ya para la reapertura, propuesta en la fase de desescalada que dará inicio tras superar la curva de la pandemia por Covid-19. Con el fin de que el sector esté debidamente informado sobre las medidas a tomar para evitar riesgos de contagio, la SEME ha elaborado un protocolo de seguridad sanitaria.
Protocolo de Seguridad Sanitaria de la SEME
La Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) ha elaborado un protocolo para garantizar la seguridad de todo el sector para reducir riesgos de contagio por Covid-19, en el que recoge una serie de recomendaciones para pacientes, trabajadores y personal médico.
El protocolo ha sido desarrollado en colaboración con las asociaciones autonómicas de Medicina Estética y cuenta con el consenso de otras sociedades científicas del sector como la Sociedad Española de Láser Médico Quirúrgico (SELMQ), la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora (SECPRE) y el Consejo General de Dentistas de España. Y por supuesto siguiendo las directrices marcadas por la OMS y el Ministerio de Sanidad español.
Recomendaciones básicas de seguridad frente al Covid-19
1. Formación: todos los trabajadores de la clínica (personal sanitario, de atención al cliente equipo de limpieza), deben ser conocedores de las medidas de protección y gestionar tanto espacios como agendas.
2. Abastecimiento de los equipos de protección necesarios para los trabajadores y pacientes, ya que durante el Estado de Alarma todo este material ha sido entregado al Ministerio de Sanidad para la lucha contra la pandemia.
3. Cuestionario telefónico previo a los pacientes para conocer si en las dos semanas previas a su cita han desarrollado sintomatología relacionada con el Covid-19 o si se han infectado, e indicaciones de cómo deben acudir a la clínica.
4. Documento de consentimiento informado sobre la prevención de contagio por Covid-19 en los centros de Medicina Estética que todos los pacientes deberán cumplimentar.
5. Desarrollo de medidas de limpieza y desinfección para cada uno de los espacios de las clínicas, y establecimiento de un circuito seguro de los pacientes.
Todas estas recomendaciones han sido compartidas con el Ministerio de Sanidad, las consejerías de las Comunidades Autónomas y con todos los países miembros de la Unión Internacional de Medicina Estética (UIME).