Una piel asfixiada o estresada, también conocida como asfíctica, presenta un aspecto opaco, con falta de luminosidad y textura engrosada, incluso con granitos o comedones. No es fácil identificar este problema cutáneo a simple vista, aunque el diagnóstico es sencillo para un profesional.
Por eso, en caso de tener alguna sospecha, lo mejor es acudir al dermatólogo o a un centro de estética donde analizarán tu piel y te aconsejarán cómo cuidarla adecuadamente. Así fue como descubrí que mi piel estaba asfixiada, gracias a las profesionales de Isséimi.
¿Qué factores pueden ser causa de una piel asfixiada?
Siempre he tenido una piel fina y bonita, con los poros cerrados y aspecto aterciopelado, pero en el último año empecé a notar una pérdida de luminosidad, brotes de acné (que no habría sufrido ni siquiera en mi adolescencia), comedones, una textura más gruesa y rugosa…
En mi caso es muy probable que la combinación del uso de la mascarilla unido al estrés y a utilizar demasiados cosméticos, fueran las causas de que mi piel se saturara, pero son muchos los factores que pueden provocar que se obstruyan los poros, como falta de limpieza facial, productos demasiado astringentes o inadecuados y el tabaco, entre otros.
El primer paso para recuperar mi piel fue el protocolo de cabina Maskné de Isséimi, que consiste en limpiar la piel en profundidad, exfoliarla con peelings e hidratarla, ayudando a desinflamarla y a regular la secreción sebácea.
¿Qué rutina debería seguir en casa para tratar mi piel asfixiada?
Ya en casa, siguiendo las indicaciones de la esteticista, incorporé a mi rutina tres productos de la marca española de cosmética Isséimi, que he estado utilizando religiosamente durante casi dos meses para cuidar mi piel y compartir mi experiencia.
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Emulsión Higienizante
La limpieza es básica para mantener en buen estado cualquier tipo de piel. Esta leche limpiadora de Isséimi está indicada para retirar todo el maquillaje y arrastrar las impurezas de la piel gracias a las micropartículas que contiene y que exfolian suavemente. Son derivadas de la celulosa y no contaminan porque son biodegradables, se disuelven fácilmente en agua.
Contiene además aloe vera, que contribuye a suavizar y reparar la piel y cuenta con propiedades humectantes y regeneradoras.
El procedimiento es sencillo, se debe aplicar el producto masajeándolo hasta su absorción y después se retiran con un algodón limpio, tissue o gasa los restos de partículas. Antes se puede utilizar una limpiadora o agua micelar, sobre todo si llevamos maquillaje.
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Kerathor 50 Plus
A continuación, empapo un disco de algodón con el tónico queratolítico Kerathor 50 Plus, que exfolia la piel para eliminar células muertas, desobstruir poros y mejorar la eficacia de los cosméticos que apliquemos a continuación.
Favorece la eliminación de grasa y la expulsión del sebo a la superficie de la piel, contribuyendo así a mejorar la oxigenación cutánea.
En su fórmula encontramos ingredientes como el hamamelis, con propiedades astringentes, descongestionantes y cicatrizantes; alfahidroxiácidos (ácidos glicólico, cítrico y tartárico), que actúan en las capas más profundas de la piel y mejoran su elasticidad; vitamina C, un potente antioxidante; y niacinamida, que combate los problemas de hiperpigmentación e hiperqueratinanización.
Aplícalo por la noche después de limpiar la piel en rostro, cuello y escote. Siempre en sentido ascendente, entre dos y cuatro veces a la semana.
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Crema O3 Depur
Por último, utilizo la crema-gel O3 Depur, que tiene una textura muy ligera y el aceite ozonizado encapsulado como ingrediente clave. Y es que una de las principales necesidades de una piel asfixiada es la oxigenación. El ozono tiene además propiedades bactericidas y fungicidas naturales y aplicado tópicamente, regula el crecimiento de los microorganismos bacterianos característicos del acné.
Contiene además aloe vera para hidratar la piel sin engrasarla y retener la humedad. Por este motivo es perfecta para tratar una piel asfixiada, regulando la secreción sebácea en las zonas más grasas y aportando hidratación en las deshidratadas.
He estado utilizando la crema O3 Depur tanto por la mañana, después de limpiar la piel, como por la noche, tras la limpieza con la Emulsión Higienizante (también se puede usar por la mañana) y el tónico Kerathor 50 Plus.
El resultado es una piel más uniforme y lisa, mucho más luminosa e hidratada y sin granitos ni molestos comedones. Para mantener los resultados es básico limpiar y exfoliar la piel con frecuencia y muy recomendable realizarse higienes faciales periódicamente en un centro especializado.
