Las acciones de Shiseido han cerrado la sesión en la bolsa de Tokio con una caída del 14,32%, la mayor en 16 años. Este registro se produce después de que la compañía japonesa anunciara el pasado viernes que su beneficio neto atribuido se había reducido un 29,4% en los primeros nueve meses de su ejercicio fiscal, hasta 20.517 millones de yenes (126,9 millones de euros), debido al boicot de los consumidores tras el vertido de agua contaminada de la central nuclear de Fukushima.
Las previsiones de Shiseido tras el boicot a sus productos
Del mismo modo, la empresa ha comunicado que las ventas también disminuyeron un 5,3% en este periodo, hasta 722.417 millones de yenes (4.469 millones de euros). Por otro lado, Shiseido adelanta que espera alcanzar unos ingresos consolidados de 980.000 millones de yenes (113,3 millones de euros) en el conjunto del año, lo que significa 10.000 millones de yenes (61,9 millones de euros) menos de lo previsto.
Estos resultados, según apunta la compañía, no sólo se deben al boicot a los productos japoneses tras el vertido de agua tratada en Fukushima, sino también a la desaceleración de China, a causa de la debilidad en el negocio de viajes minoristas y el negocio del país, que aún se ve afectado por los ajustes de inventario de los minoristas.