Goldea, el nuevo perfume femenino de Bvlgari, es como un cuento que reúne tres historias fascinantes a la vez: la de un joyero que amaba crear piezas hermosas para embellecer a las mujeres; la del oro, el metal más deseado; y la de Cleopatra, símbolo de la fascinación.
El primer capítulo de la historia de Goldea arranca hace más de 130 años, cuando un joven joyero, Sotirio Georgis Bulgari, decidió crear joyas únicas para las mujeres más elegantes. Se instaló en Roma, donde comenzó a deslumbrar con sus piezas preciocistas y delicadas. Desde entonces, las creaciones con el sello de Bvlgari no han dejado de crecer, convirtiéndose en un icono en el mundo de la joyería. Uno de los puntos álgidos de la historia de Bvlgari llegaría en la decada de los años 50 del siglo pasado, cuando Italia se convertía en una de las grandes mecas del cine y reunía a las mujeres-icono de la época. El siguiente capítulo de esta historia habla del oro amarillo, la materia prima sobre la que los artesanos-joyeros de Bvlgari han dado vida a sus creaciones. Y el tercer capítulo: Cleopatra, una mujer adelantada a su época, inteligente, con una fuerte personalidad y un carácter seductor, que lleva despertando la imaginación de artistas y creadores desde hace más de 2000 años.
La inspiración
Partiendo de estos tres elementos, el nariz Alberto Morillas ha creado Goldea. «Como un orfebre, quise cincelar el resplandor del oro como una gota de agua helada atravesando un campo luminoso. Es una creación profunda y sensual, que resplandece sobre la piel desnuda y recuerda los extravagantes volúmenes de las joyas Bvlgari. Si fuera un objeto, Goldea sería una escultura dorada de Brancusi. Si fuera un color, sería el de una bola de oro reflejando el resplandor del cielo, como una puesta de sol».
El perfume
Goldea es homenaje a los almizcles, tan característicos de las fragancias de Bvlgari. Sus notas complejas e intensas están presentes desde el mismo momento en que se abre el perfume, realzando la frescura de la flor de naranjo y la sensualidad del ylang-ylang y los pétalos de jazmín. Al final quedan el papiro egipcio y el pachulí dorado, para evocar la forma de perfumarse de los antiguos egipcios.
El frasco
La tradición joyera de Bvlgari se plasma de muy diversas formas en el frasco de Goldea, convirtiéndose en una pequeña obra de arte. Está realizado en cristal pulido, como un guiño a las piedras preciosas con las que fabrican sus joyas, y en un intenso todo dorado que refleja la luz. El tapón es un cabujón con la forma de un círculo perfecto, como el que representaba al sol en Egipto. Otro de sus símbolos icónicos es el anillo con escamas que lo rodea, que recuerda a una serpiente, una de las joyas más importantes de la casa.
La campaña
La modelo brasileña Isabeli Fontana encarna la imagen de Goldea. Su imagen transmite una luminosidad íntima, majestuosa y cálida, pero tambien fuerza y carácter, acentuado por las joyas Serpenti que lleva puestas.
Goldea, edp 90 ml, PVPR 135 €