Desde que el pasado mes de julio Prada presentase la primera fragancia de Miu Miu en una espectacular fiesta celebrada en París, nos sentíamos en el «deber» de hablaros de este singular perfume. Pero había que ser cautas y mantener los post bien atados hasta septiembre, que es cuando vais a poder encontrar la fragancia en el punto de venta…
La fragancia ha sido realizada baja la batuta de Miuccia Prada, que ha contado para la ocasión con Coty, empresa que desarrolla perfumes para grandes marcas, como Calvin Klein o Chloé, por poneos solo un par de ejemplos. Perfeccionista y detallista, Miuccia no quería dejar nada al azar y por ello se ha involucrado de lleno en el proceso de creación del perfume. Ella, que entiende que la moda no es algo superficial, sino que tiene el poder de construir la identidad de la mujer, quería lograr una fragancia que desatase emociones y recuerdos.
El perfume
Miuccia quería jugar con la contradicción en este perfume, combinar lo común y lo ultra refinado para crear algo sorprendente pero nada artificial. La encargada de materializar sus ideas en la composición olfativa ha sido la perfumista Daniela Andrier, que ha trazado una partitura que da comienzo con un muguete sensual y floral, compuesto por jazmín, absoluto de rosas y notas verdes sintéticas. Esta salida suave y fresca, se asienta sobre un fondo terroso, a base de madera y pimienta de Akigalawood y extracto de pachulí. Esto se traduce en una combinación que provoca una sensación natural de flor y tierra.
Con el frasco también se ha jugado a la contradicción. Nos llama la atención el suave cristal opaco de color azul, que recuerda al emblemático estilo acolchado de Miu Miu, y el cuello blanco, con una nota tradicional y pop a la vez. Mientras que el translúcido disco rojo le añade un toque divertido, gráfico y extravagante. El resultado es un frasco elegante, joven y femenino que parece recrear un sueño technicolor.