Nivea ha relanzado su tratamiento más icónico, Q10, denominado así por la coenzima Q10, una sustancia que está presente en todas nuestras células y que proporciona la energía y protección necesarias para el correcto funcionamiento de la piel. La innovación del nuevo tratamiento Nivea Q10 Power reside en que ahora incluye una coenzima Q10 idéntica a la de la piel, lo que aumenta su eficacia. ¿Cómo es posible?, te preguntarás. Para responderte de manera adecuada, el equipo de NewsFragancias ha planteado todas las cuestiones que nos han parecido más relevantes acerca de esta innovación a María Segurado, dermatóloga y asesora de Nivea.
María Segurado, asesora dermatológica de Nivea, nos explica cuál es la innovación de la nueva fórmula Q10 Power
¿En qué se diferencia la nueva fórmula de Nivea Q10 Power con respecto a la anterior?
Nivea ha alcanzado un nuevo hito revolucionario en el desarrollo del ingrediente Q10, del cual fue también precursor en su uso en cosmética: introducir por primera vez una coenzima Q10 100% idéntica a la de la piel en la fórmula de su línea facial Q10 Power, gracias a un proceso de fermentación natural con levadura.
Hasta ahora, la coenzima Q10 se obtenía a través de una fermentación bacteriana. Nivea ha optimizado este proceso, transformándolo a una fermentación natural de levadura para obtener coenzima Q10 idéntica en estructura a la que produce el organismo humano de manera natural. Este proceso es la única forma de garantizar un producto puro de alta calidad, siendo el grado comercial de coenzima Q10 más puro disponible en el mercado.
Con esta nueva calidad pura y natural de coenzima Q10 podemos reponer aún mejor las carencias de este ingrediente que van surgiendo en nuestra piel, por tener una biodisponibilidad más alta que la Q10 obtenida por fermentación bacteriana, y, por tanto, trabaja en perfecta armonía con los procesos biológicos naturales de la piel.
Además, gracias a este nuevo proceso, es posible optimizar su eficacia con la misma cantidad de Q10.
¿Qué beneficios tiene la coenzima Q10 para la piel?
La coenzima Q10 es imprescindible para la vida, está presente de forma natural en todas nuestras células. Además, afecta al rendimiento de los órganos y, como no podía ser de otra manera, al de la piel, nuestro órgano más grande.
Mientras somos jóvenes, la coenzima Q10 se produce en las cantidades suficientes para que las células cumplan sus funciones, pero con la edad, esta coenzima comienza a disminuir, y la piel se vuelve más propensa a mostrar los distintos signos de la edad.
La coenzima Q10 cumple dos funciones básicas en nuestra piel: proporciona energía y protección para combatir de forma natural el proceso del envejecimiento.
Por un lado, proporciona un 95% de la energía que la célula necesita para crecer, protegerse y regenerarse, y por otro, tiene una función antioxidante, al neutralizar los radicales libres que aceleran el envejecimiento y proteger el colágeno de su degradación.
¿Cómo se obtiene la coenzima Q10?
Se obtiene por fermentación natural, pero antes quiero recordar que la experiencia de los laboratorios de Nivea con la coenzima Q10 viene de lejos. Desde que esta coenzima fuera descubierta en 1978 por Peter Mitchel, científico que se alzó con el Premio Nobel de Química por tal hallazgo, los laboratorios de Beiersdorf, compañía propietaria de Nivea, no han cesado de investigar para encontrar aplicaciones cosméticas. Es en 1998 cuando la compañía demuestra que la coenzima Q 10 tiene efecto antienvejecimiento sobre la piel y cuando lanza la primera fórmula Nivea Q10.
Desde entonces, Nivea no ha cesado de investigar y ha continuado mejorando sus fórmulas de cuidado de la piel. Ahora, la marca ha dado un paso más, y ha obtenido una forma de Q10 idéntica a la de la piel, resultante de un proceso de fermentación natural de levadura. Esta coenzima Q10 es la que encontramos en la línea Nivea Q10 Power.
La fermentación no es un concepto nuevo, sino que nos ha acompañado a lo largo de la historia. Se trata de un proceso natural que cuenta con miles de años por el que las sustancias orgánicas pueden convertirse o perfeccionarse mediante la adición de ciertas bacterias, microorganismos o levaduras. Algunos productos conocidos que pasan por este proceso durante su producción son el yogur, los granos de cacao y las bebidas alcohólicas. Trasladado al mundo de la cosmética, la fermentación da como resultado fórmulas más puras, con mayor biodisponibilidad que son, por tanto, más eficaces.