El consumo sostenible, cada vez más relevante para los españoles

El consumo sostenible, cada vez más relevante para los españoles

El interés de la población por el consumo sostenible va en aumento. Según Nielsen, el 73% de los españoles considera que la sostenibilidad es más importante para ellos que hace dos años.

Crece el interés por el consumo sostenible

El informe «El clima cambiante de la sostenibilidad», elaborado por Nielsen IQ, revela que tres de cada cuatro españoles otorga más importancia a la sostenibilidad que hace dos años –el 56% manifiesta que la sostenibilidad es mucho más importante que hace dos años, mientras que el 17% considera que es algo más importante–.

¿Cómo ha modificado su comportamiento el consumidor para ser más sostenible?

  • 65% lleva sus propias bolsas de la compra.
  • 61% separa conscientemente la basura para su reciclaje.
  • 56% reduce el consumo de electricidad.

No obstante, existe un hándicap para que más consumidores adopten un estilo de vida sostenible, ya que el 49% considera que el precio de los productos sostenibles les impide modificar sus hábitos. Los siguientes motivos que frenan la adopción de prácticas sostenibles son las dificultades para encontrar productos sostenibles en las tiendas y la falta de claridad en la información de los productos (31%).

El papel de los fabricantes y de los distribuidores

Según la consultora, en los próximos 5-10 años vamos a asistir a una rápida evolución en la percepción de la sostenibilidad por parte de los consumidores que va a obligar a fabricantes, a marcas y a distribuidores a transformarse y a comprometerse con un modelo de negocio responsable con el medio ambiente y con la sociedad.

Es significativo el dato de que el 79% de los encuestados en España declare elegir el establecimiento comercial para realizar sus compras en función de las opciones sostenibles de su surtido. Además, el 82% pide que las empresas tomen la iniciativa para reducir su huella ambiental. El 76% desearía que las empresas mostraran transparencia en la cadena de suministro para poder adquirir artículos con un criterio sostenible.

Un aspecto con el que los consumidores son muy críticos es con el greenwash (o baño verde, entendido como camuflar de sostenible un producto que no lo es): el 77% afirma que dejaría de comprar productos que hayan sido tildados de greenwash, ya que supone una quiebra en la confianza de la marca.

«Nos encontramos en un punto de inflexión, en el que las empresas que han sido proactivas y genuinas en cuanto a la acción climática tendrán una enorme ventaja, ya que la industria se está esforzando en cumplir los requisitos y los esfuerzos sostenibles obligatorios”, explica Patricia Daimiel, directora general para el sur de Europa de Nielsen IQ, que señala que la responsabilidad recae tanto en los fabricantes como en los distribuidores.