Protectores solares, maquillaje, cremas, gafas de sol, vinos y licores figuran entre los productos más hurtados en verano, la campaña más sensible al hurto comercial después de Navidad.
En los últimos años, el número de turistas que vienen a España ha ido creciendo, repercutiendo positivamente en el consumo local, y lo mismo se espera que suceda este verano. Según pronostica Exceltur, al cabo de 2016 el turismo crecerá un 3,8% y apunta que acumula 10 trimestres consecutivos superando el 3% de incremento. La inestabilidad en el Mediterráneo, el abaratamiento del petróleo y la progresiva recuperación de la economía familiar, explican el atractivo de España como destino turístico. Sin embargo, las opciones de aumentar las ventas para el comercio español se ven recortadas por el habitual repunte del hurto en verano, dado que está época es la preferida por los hurtadores, después de la Navidad, en función del Barómetro Mundial del Hurto de Checkpoint.
En 2015, España cerró con 68,1 millones de turistas extranjeros, una cifra histórica que superaba en un 5% la del año anterior. Según la Encuesta de Gasto Turístico del INE, gastaron 67.385 millones de euros (+6,8%), siendo Canarias, Cataluña y Andalucía los destinos preferidos por los extranjeros, que se convierten en una palanca de consumo de primer orden para los minoristas de las zonas turísticas. «Las rebajas provocan un constante movimiento de mercancías y personas y las vacaciones refuerzan más esta dinámica. Es fácil caer en descuidos si la tienda no está perfectamente equipada y con una plantilla preparada para utilizar las soluciones antihurto», advierte el director general de Checkpoint, David Pérez del Pino.
En las zonas turísticas, gafas de sol, vinos y licores, cremas, maquillaje protectores solares son los productos más codiciados por los amigos de lo ajeno. Para protegerlos, los minoristas utilizan etiquetas antihurto adaptadas a cada tipo de producto y soluciones Alpha como cajas de policarbonato o collarines de botellas, que están diseñadas específicamente para los productos con más riesgo de hurto.
Aparte de los hurtadores externos, las ventas pueden menguar por otros factores internos: el 18% del hurto en tiendas lo cometen los empleados y los errores administrativos provocan otro 25% de pérdida desconocida. Esta tendencia se agudiza en las campañas de verano y de invierno, debido a la contratación de trabajadores temporales que tienen menos conocimiento de los procesos internos de la tienda.