A finales de febrero, Shiseido cerró la venta de sus marcas Carita y Decléor a L’Oréal por 230 millones de euros, poniendo punto final a las negociaciones iniciadas el pasado 18 de octubre tras recibir una oferta de la multinacional francesa por las dos marcas.

La operación se enmarca en un momento en que la japonesa está aplicando una estrategia de selección y concentración de su actividad, con el fin de potenciar aquellos campos en los que es más fuerte para ser más rentable y elevar los beneficios. Aunque Shiseido posee una división profesional, con las marcas de cuidado capilar Shiseido Professional y Joico como principales activos, ha decidido impulsar este negocio en Asia, donde el cuidado capilar profesional está creciendo fuertemente. Como la actividad de Carita y Decléor está focalizada en cuidado de la piel y circunscrita a Europa, la japonesa ha visto conveniente para sus intereses vender las dos marcas.

Por su parte, el objetivo de L’Oréal es enriquecer con cuidado de la piel su división profesional, muy potente en cuidado capilar. «Este proyecto es una maravillosa oportunidad para nuestra división de convertirse en un actor principal de la cosmética profesional», declaró en octubre la presidenta de la división profesional, An Verhlust-Santos.

La marca creada por las hermanas Carita en 1945 fue adquirida por Shiseido en 1986, mientras que Decléor, fundada por Solange Dessimoulie en 1981, se integró en Shiseido en el año 2000. Carita, con presencia en 56 países, y Decléor, comercializada en 80 mercados, facturaron conjuntamente 100 millones de euros en el ejercicio 2012.

En España, la plantilla de las dos marcas se integrará al completo en la estructura de la división profesional del grupo L’Oréal.

La operación está supeditada a la aprobación de las autoridades.