El grupo francés Hermès ha completado un primer semestre excelente, destacando en su cuenta de resultados la progresión del beneficio de explotación y, sobre todo, del margen que alcanzó el 34,3% de las ventas, el nivel más alto en su historia.
La facturación de Hermès se situó en 2.713 millones de euros y progresó un 11% (un 10% a tasas de cambio constantes). El resultado de explotación se incrementó un 13% hasta los 931 millones, lo que representa el 34,3% de las ventas. Y el beneficio neto progresó un 11% al elevarse a 605 millones, lo que equivale al 22,3% de las ventas.
Oficios
Salvo la división de relojería, todas las actividades han contribuido al crecimiento, si bien las dos de mayor peso han liderado el avance. Así, la marroquinería creció un 14%, hasta los 1.404 millones de euros, y ropa y accesorios, un 12%, hasta los 579,2 millones, representando el 51,7% y el 21,3% de la facturación total, respectivamente. En el caso de la marroquinería se ha visto favorecida por el aumento de la producción derivado de las tres nuevas fábricas inauguradas en Francia. Esta política local
Cabe destacar también la evolución experimentada por el negocio de los perfumes, que ha crecido un 8% al elevarse a 134,4 millones de euros. Hermès atribuye el impulso a los lanzamientos de Galop d’Hermès, Eau de Néroli Doré y Eau de Rhubarbe Écarlate.
Zonas
Asia es el principal mercado de Hermès y el que mejor evoluciona. Sin Japón, creció un 14% impulsado por China. Japón progresó un 3%, a pesar de la revalorización del yen.
Europa se mantiene como el segundo mercado en importancia. Las ventas subieron un 7% hasta los 836,2 millones. Francia generó el 43% de la cifra, y su evolución del 2,4% tiene mucho mérito habida cuenta de lo ha sufrido el mercado del lujo en Francia por los ataques terroristas.
Las ventas en América registraron un avance del 9%, si bien es la región más débil para la compañía.