La cadena de Perfumerías Marionnaud cierra en España y Portugal para centrar sus esfuerzos en otros países con mejor retorno de la inversión. El próximo mes de enero, la cadena de perfumerías echará el cierre en todas sus tiendas de la Península, 46 en España y 7 en Portugal, que representan el 5% de todo su tejido detallista.

El director adjunto de CK Hutchison, holding chino propietario de la cadena, Dominic Lai, ha afirmado que el cierre de Marionnaud es una decisión meditada. «Después de analizarlo en profundidad, hemos tomado la decisión de salir de España y Portugal dado que tenemos una presencia relativamente pequeña en esta amplia población. La inversión se centrará en otros países que pueden producir mejor retorno de la inversión».

Los clientes podrán seguir comprando en Marionnaud tanto en las perfumerías físicas como en la tienda online durante los próximos meses hasta que se produzca el cese total de la actividad a finales de enero de 2020.

La empresa ya está comunicando el cierre a los 270 empleados, afirmando que seguirá todos los procedimientos legales en este proceso.

La cadena continuará su actividad en 8 mercados: Francia, Suiza, Italia, Austria, República Checa, Hungría, Rumanía y Eslovaquia. «Solo en los últimos dos años hemos invertido más de 40 millones de euros en desarrollar la transformación digital y mejorar la red de tiendas, con resultados alentadores», ha añadido Lai.

Fundada en 1985 por Marcel Friedman en Francia, Marionnaud fue adquirida en 2005 por A.S. Watson, subsidiaria de CK Hutchison.

Marionnaud aterrizó en el mercado español en 2001 mediante la adquisición de la red de perfumerías catalana Xplora. Entonces Marionnaud era la segunda cadena europea, por detrás de Douglas, y aspiraba a ser número uno. El directivo italiano Massimo Scatarreggia lideró una ambiciosa estrategia de crecimiento basada en la adquisición de distintas cadenas regionales, como la bilbaína Etxezuri o la madrileña Conrado Martín entre otras, hasta situarse en 175 puertas en un corto espacio de tiempo.

En 2014, en plena crisis y dirigida por Mark Nunn, Marionnaud redujo drásticamente su tejido comercial hasta el medio centenar de tiendas entre los dos países.

Entre 2008 y 2013 había acumulado unas pérdidas de 94 millones de euros y suprimiendo las tiendas no rentables, esperaba asegurar la viabilidad del negocio. Pero no ha podido ser.