Stanpa aplaude el golpe francés contra Equivalenza

Inicio Profesionales Distribución Stanpa aplaude el golpe francés contra Equivalenza

La patronal española Stanpa ha alabado la firme actuación de las autoridades francesas ante lo que denomina un modelo de negocio basado en el parasitismo de marca. La directora general de Stanpa, Val Díez, asegura que el sector está muy preocupado por la rápida extensión, a través de un modelo de franquicias, de “un fenómeno claramente parasitario, en el que se implica a personas que, en su proceso de búsqueda de empleo, pueden aceptar un modelo de negocio que contiene indicios de prácticas ilegales, motivo de la intervención en Francia”. Y es categórica: “No se puede amparar la creación de empleo sobre una práctica ilegal. No se puede basar el éxito propio en aprovecharse de la reputación ajena”. En velada alusión al mensaje de Equivalenza de que su fin es democratizar los perfumes, Díez afirma que el sector cosmético es altamente competitivo y democrático, “existen enseñas de todo tipo, con productos en un amplio rango de precios. Cualquier nuevo competidor tiene su espacio siempre que lo haga de forma leal y respetando la legislación”.

Sentencias en España contra Equivalenza

Asimismo, el comunicado de la patronal recuerda que en nuestro país la justicia ha condenado la venta de perfume utilizando la reputación de las marcas renombradas.

En el mes de enero de este año, los tribunales condenaron a Equivalencia por infracción de marca y competencia desleal, imponiéndole una indemnización, además de instarle a llevar a cabo cualquier acto de comercialización, ofrecimiento, publicidad o promoción de sus perfumes de quivalencia haciendo uso de las marcas registradas y a abstenerse de suministrar a sus franquiciados cualquier tipo de material en el que se haga uso de otras marcas.

En junio, una nueva sentencia confirmó que utilizar marcas ajenas es ilegal, ratificando en todos sus terminos la infracción de marca producida y calificando la conducta de competencia desleal, obligando a dejar de utilizar las marcas renombradas en el proceso de venta de otros perfumes que pretenden imitarlos.