Las 10 tendencias de consumo para 2017

Inicio Profesionales Industria Las 10 tendencias de consumo para 2017

Euromonitor ha clasificado las 10 tendencias globales de consumo para 2017 tras analizar las tendencias predominantes, hábitos de consumo y decisiones de compra entre varios tipos de consumidores, industrias y países.

A lo largo de este año, los consumidores utilizarán más que nunca herramientas digitales para satisfacer sus necesidades. El consumo estará marcado por la posibilidad de hacer compras más rápidas, el uso de herramientas digitales, el bienestar como símbolo de estatus, la personalización de los productos y servicios, la atracción por la autenticidad y por los productos que nos defiendan las amenazas… en un año en el que, por primera vez, casi un cuarto de la población mundial tendrá más de 50 años.

1. El envejecimiento

Las marcas están centrando su atención en los consumidores que ya han cumplido los 50. Estos están redefiniendo la idea de persona mayor y demandan más sobre sus necesidades de consumo, dando lugar a lo que se conoce como «economía de la longevidad». Son entusiastas de productos para la salud y la belleza y de opciones vanguardistas. También son muy receptivos a las innovaciones tecnológicas. Entre los consumidores de mediana edad y mayores hay un hábito que va a más, el de actuar como si fueran más jóvenes de lo que realmente son. A esto se le llama ‘midorexia’, un término sarcástico que encierra la alta versatilidad de su estatus y el desafío a lo que se consideran comportamientos apropiados para la gente mayor.

2. Consumidores en entrenamiento

La actual forma de vida, con dificultades para conciliar trabajo y familia, está involucrando en el acto del consumo a una edad más temprana a los más pequeños de la casa. «Cada vez más los padres ven con buenos ojos la participación de los niños en las decisiones de compra, en lugar de percibirla como una molestia», asegura el informe de Euromonitor. Esta actitud junto con el mundo online están exponiendo a las marcas frente a los consumidores del futuro, ocasión que muchas están aprovechando para empezar a crear lazos.

3. Productos extraordinarios

Los productos estándar pierden atractivo. Internet permite comprar productos y servicios únicos, personalizados, exóticos… y opinar sobre ellos, por lo que se ha convertido en territorio para consumidores que no entran en las medidas estándar o que no encajan en las corrientes dominantes. Las compañías están escuchando las quejas de los clientes que se sienten marginados y dando respuesta a sus necesidades.

4. Compras más rápidas

El mundo digital ha implantado la inmediatez en las gestiones, generando la impaciencia entre los consumidores. Las marcas están desarrollando modelos de negocio acelerados, que van desde entregas de pedidos en una hora o gestión automática de servicios a lanzar ofertas por medio de tecnología Beacon, a la que recurren los detallistas para enviar promociones a sus consumidores en un radio cercano a través de sus smartphones.

5. Fascinación por la autenticidad

Otro de los valores que más fuerza han adquirido es la autenticidad. La cultura visual impuesta por las tecnologías digitales (que dan la opción de actuar como un fotógrafo a todos los usuarios de un smartphone) está modificando la percepción de la belleza y la estética de campañas de bienes o servicios de lujo. Muchas marcas están recogiendo las fotografías de sus consumidores en su material de marketing para hacerlo parecer más auténtico y cercano, no tan sofisticado. Por no mencionar, cómo los consumidores vía redes sociales castigan estrategias deshonestas o los errores de Photoshop. En Facebook, el perfil Le Greenwashing et les cosmétiques faussement naturels denuncian los cosméticos falsamente etiquetados como ‘naturales’.

6. Identidad en movimiento

Euromonitor señala que la naturaleza de la identidad está cambiando. La tensión entre lo global y lo local ha sido sacudida por la crisis de los inmigrantes. Aunque el concepto de identidad es más fluido y elástico se siguen produciendo desigualdades y prejuicios en torno a la diversidad, como ocurre con la raza y el cambio de género (el testimonio de Caitlyn Jenner ha ayudado a la causa). Las marcas están obligadas a repensar quiénes conforman su público y cómo interactuar con las distintas identidades.

7. Personalícelo

La demanda de la personalización se impone tanto en el producto como en la experiencia. Con la personalización y el concepto ‘a medida’, las marcas saben que fortalecen el vínculo emocional con el cliente y les permite obtener más datos sobre el cliente para seguir adaptando sus propuestas.

8. Post-compra

Los compradores prestarán más atención a su experiencia post-compra, una parte cada vez más importante en el valor de un producto, advierte Euromonitor, por lo que cobra importancia como herramienta para fidelizar al cliente. Más negocios están ofreciendo asesoría y soporte personalizado con la compra. Las marcas de moda, por ejemplo, ofrecen servicios de estilo y personal shopper.

9. Privacidad y seguridad

La incertidumbre político-social del mundo está alentando la ansiedad de los ciudadanos por su seguridad y la de los suyos. Son muy atractivos los bienes y servicios que ayuden a los consumidores a sentir que adquieren el control sobre su seguridad frente a las amenazas de distinto orden. Hay negocios que están ofreciendo soluciones a la preocupación sobre el impacto negativo de la contaminación, desde purificadores de aire y máscaras hasta cremas que protegen de las partículas contaminantes que aceleran el envejecimiento prematuro.

10. Bienestar como símbolo de estatus 

Una vida saludable se está convirtiendo en símbolo de estatus habida cuenta de que cada vez más consumidores presumen de su pasión por el bienestar, haciendo del ejercicio (con indumentaria adecuada y de diseño), los alimentos sanos, las vacaciones orientadas a la salud un estilo de vida. Las vacaciones dedicadas a la salud física y mental es un sector en crecimiento. El dinero no es problema cuando se trata de darse lujos de alta gama y tratamientos de rejuvenecimiento en spas de hoteles o en centros dedicados al bienestar, con alimentación sana, porque entienden que están mejorando su calidad de vida.